LINKS RECOMENDADOS

BOLETÍN DE NOTICIAS

Recibe semanalmente las actualizaciones de Alf World.

El Viacrucis de la Selección

La crisis de la Selección Mexicana tiene raíz en algo más profundo que la mera baja de juego

(22 de julio)

 

El tema de discusión en esta ocasión es el pésimo fucionamiento de la Selección Mexicana rumbo al Mundial de Sudáfrica 2010. No hablamos sólo de malos resultados, y que hasta el día de hoy se encuentra en cuarto lugar del Hexagonal Final, sino que en verdad no tiene pies ni cabeza.

 

Me da una pena tremenda que México haya perdido su hegemonía y el sobrenombre de 'Gigante de la Concacaf', pero siento peor que el lugar nos lo haya arrebatado un equipo como Estados Unidos, que hace unos 20 años creían que el futbol se jugaba en patines o con gallito de badminton.

 

Lo peor de todo es que otros países de la zona tienen otros deportes donde destacan, ya sea el voleibol, el beisbol y muchos otros, mientras que en México no se habla de otra cosa que de futbol, se pagan unos sueldos altísimos a los profesionales de este deporte, mientras que los ciclistas o clavadistas deben vivir de las migajas de otros. (Continúa)

 

"¿Qué es lo que está pasando con la Selección?", se preguntarán ustedes... Pues bien, a mi juicio ocurre un fenómeno que es el del pez globo. Los jugadores mexicanos son insignificantes jugando en el balonpié nacional, pero cuando son llamados a jugar en el extranjero se inflan justo igual que un pez globo, pero cuando son rechazados o sentados en la banca de esos clubes, se vuelven a desinflar y quedan peor que al principio.

 

En este momento hay muchos jugadores que tienen ese síndrome, casos como el de Omar Bravo, Guillermo Franco, Giovani dos Santos y algunos otros que no forman parte de la Selección; por el contrario, jugadores que son constantes en sus equipos extranjeros (tal es el caso de Rafael Márquez, Carlos Salcido y Guardado) difícilmente se comprometen con la camiseta verde, o van saliendo de una lesión, o simplemente se contagian por la apatía del resto.

 

Otra situación que afecta al equipo es que los jugadores provenientes de clubes mexicanos no tienen el nivel requerido para la competencia, en especial la actual carencia de goleadores. Los clubes en México han caido de manera más evidente en el vicio de contratar extranjeros para ser los "hombres-gol".

 

La "Generación Dorada" que ganó el campeonato mundial Sub-17 ya se perdieron entre las cenizas, son pocos los que siguen destacando, y muchos otros han mostrado una baja garrafal de juego. No importa cuántos jugadores prueben, ni qué entrenadores se encarguen del equipo... La fractura ya está hecha, y es una falla en los cimientos de la estructura de este deporte.

 

Cuál es, entonces, el enemigo invisible... Se trata de la desprofesionalización de los dirigentes del deporte; sólo buscan la remuneración económica y no invierten en la generación de nuevos talentos, pero lo que sí hacen es abrir el mercado de extranjeros que reditúa económicamente, pero no futbolísticamente.

 

Como bien lo decía un comentarista consagrado de la cadena ESPN, Carlos Albert, hasta que los aficionados no nos pongamos en contra de esta manipulación truculenta y de esta mafia que representa el futbol mexicano, nada va a cambiar. Este comentarista exhortó en su momento a que no fuéramos a los estadios, no viéramos las transmisiones televisivas y les pegáramos a los dirigentes del balonpié en el único lugar donde les duele: el bolsillo.

 

Ahora únicamente resta esperar y ver cómo se comporta la Selección Mexicana con esta leve mejoría que ha mostrado en la Copa Oro, porque todos queremos que México vaya al Mundial, pero internamente tenemos un diablito que nos dice "ojalá que nos eliminen, ojalá que todos los beneficiados de este deporte sufran para que haya un cambio". Sólo el tiempo lo dirá...

 

Comentarios: 0